1ª T. de ‘The Mandalorian’, una extensa película clásica de Star Wars


Me imagino que todavía tendrán que pasar varios años, pero espero que algún día se reconozca a Jon Favreau como el gran director que es. Tal vez nunca llegue a convertirse en un referente a la altura de, por ejemplo, Martin Scorsese (El Irlandés), pero sin duda su labor tras las cámaras ha servido para reorientar la industria. O al menos, para alimentar el fenómeno de masas en el que se ha convertido una parte del séptimo arte. Suyo es el éxito de Iron Man allá por 2008, y que fue la primera piedra del evento cinematográfico más grande de los últimos años (si no de la historia). Y suyo es también The Mandalorian, al primera serie de Disney+ que ha logrado algo que parecía imposible: que los fans de Star Wars recuperaran la fe en el universo creado por George Lucas y que, de un tiempo a esta parte, se había dejado llevar.

Estos primeros 8 episodios cuentan con todo lo que la saga clásica siempre había tenido. Como si de una extensa película se tratara, el arco narrativo de cada capítulo se plantea casi como una secuencia de cualquiera de los films, viajando de planeta en planeta defendiendo a ese pequeño Yoda que tan famoso se ha hecho en muy poco tiempo. Y sí, visualmente hablando la serie tiene todo lo que se puede esperar de una producción galáctica como esta. Ambientada en un momento entre El retorno del JediEl despertar de la fuerza, en la historia aparecen soldados imperiales, cazarrecompensas, personajes que utilizan la Fuerza, planetas muy conocidos por los fans, batallas de naves. Todo con un acabado impecable que, sin duda, convierten a esta producción en una de las más caras de la televisión. Pero evidentemente, lo más interesante de la serie está debajo de toda esa capa de efectos especiales.

Si algo convierte a The Mandalorian en la ficción que es, y que evoca mucho, muchísimo, el espíritu de la trilogía original, es el tratamiento de su historia y de sus personajes. Prácticamente cada episodio tiene como referente un género cinematográfico diferente, desde el western hasta el cine bélico, pasando por la ciencia ficción más kubrickiana o, incluso, la comedia familiar. Pero más allá de cómo se cuente cada historia individual, lo que prevalece es ese ambiente de un hombre en busca de su destino, enfrentándose a fuerzas que no llega a conocer del todo bien y contando para ello con un puñado de recursos y aliados a su alcance. Si en lugar de pistolas láser y naves espaciales tuviésemos revólveres y diligencias, estaríamos hablando de uno de los mejores western de la televisión. Pero no, es ciencia ficción, y es de la mejor ciencia ficción que puede verse actualmente.

Favreau crea unos episodios amenos, diferentes unos de otros, dinámicos y a su vez cargados de un dramatismo que solo se consiguió en las películas originales (y algo en la segunda trilogía). Y lo más interesante de todo es cómo logra que no sea necesario conocer la historia previa. A través de los diálogos y de una clara estética decadente la serie es capaz de situar al espectador en una postguerra cuyas secuelas dejaron unas heridas que no han cicatrizado. De este modo, así como la historia es un vehículo para abordar conceptos como lo correcto, el sacrificio, la amistad o la lucha por la supervivencia, el tratamiento narrativo sirve para narrar, valga la redundancia, más allá de diálogos o personajes a cada cual más curioso, utilizando el propio desarrollo argumental para avanzar tanto en el marco en el que se desarrolla la acción como en el futuro de la misma, sirviendo como puente entre las dos películas a las que hacía referencia más arriba. Un puente que, a tenor de cómo finaliza el último capítulo de la temporada, permitirá explicar en futuras entregas (hay confirmada ya una tercera sin ni siquiera haberse estrenado, a fecha de este artículo, la segunda parte) el origen de nuevos órdenes con los que los fans ya se han familiarizado.

Que la Fuerza te acompañe

The Mandalorian es puro Star Wars. Pero también es mucho más. Acostumbrados como estamos a abordar este universo siempre dentro de unos parámetros muy concretos (lo que ha venido llamándose la saga Skywalker), la serie creada por Favreau, aunque tiene conexiones más que evidentes con esa saga, se desvía notablemente de la misma para mostrar una galaxia mucho más rica, más compleja. Y esto pone el foco sobre algo muy interesante que hace a esta historia más humana todavía. Los protagonistas desconocen lo que ha ocurrido. Sí, saben de la derrota del Imperio, de rebeldes y, posiblemente, de algún que otro soldado. Pero, como se menciona en algún que otro momento, los Jedi son una leyenda, la Fuerza un mito, y los personajes que protagonizaron las aventuras fílmicas, posiblemente un susurro en el viento.

Dicho de otro modo, y aunque hay claras referencias que permiten situar la acción, la trama es completamente independiente de la línea argumental que todos conocemos. Esto no solo es arriesgado, sino que abre un abanico de posibilidades narrativas único, capaz de ofrecer una libertad casi infinita a la hora de construir la historia. La apuesta de los creadores de esta ficción les sale bien, extraordinariamente bien. Porque además de recuperar la esencia de la obra de George Lucas mira en otra dirección, lejos de Jedi, Sith y demás personajes, para centrarse en gente «de la calle», en gente común y corriente que trata de sobrevivir en un mundo devastado. Es especialmente interesante, en este sentido, cómo se plantean algunos hitos dramáticos, en especial los que tienen que ver con el origen del protagonista, el clan al que pertenece y el mundo de los cazarrecompensas.

Narrativamente hablando, ya hemos mencionado que esta primera temporada se podría entender casi como una extensa película en la que cada episodio equivale a una escena. Pero lo más interesante es cómo se construyen esas escenas/capítulos. Aunque con puntos en común (al fin y al cabo, es una serie de Star Wars), lo cierto es que cada uno cuenta con una esencia diferente, única. Al comienzo asociaba esto a los géneros, y es evidente que eso existe, pero va más allá. Se trata de la apuesta visual de cada director, de su modo de narrar las secuencias de acción, ya sean en tierra o en el espacio. Se trata de una visión diferente casi cada vez con la que, lejos de generar confusión, se consigue una visión más completa de los personajes. Porque, en efecto, esta serie no sería nada sin unos protagonistas extraordinarios, sólidos, magistralmente definidos dentro de unos arquetipos muy conocidos por el gran público (el héroe con corazón, la enemiga reconvertida en aliada, los inesperados amigos,…). Son ellos los cimientos que permiten construir todo lo demás.

Desde luego, The Mandalorian ha sabido ser lo que la última trilogía no ha podido. Lejos de grandes efectos (que los tiene, y muy buenos), la trama de esta primera temporada se presenta como un viaje de redención de un héroe que se rebela contra el destino para emprender un camino contra los restos de un imperio. Jon Favreau compone una historia cargada de emoción, drama, acción e, incluso, algo de suspense, presentando en sociedad a ese «baby Yoda» que ya se ha hecho famoso. Lo cierto es que se le pueden sacar pocos «peros» a una producción tan sólida en todos sus aspectos. Tal vez su hándicap sea que es una historia de Star Wars, y eso puede generar recelos en muchos espectadores. Pero en el caso que nos ocupa es conveniente dejar a un lado las reticencias y entregarse a un espectáculo narrativo y visual brillante. ¡Ah! y atentos a la banda sonora y los títulos de créditos finales de cada episodio. Son auténticas joyas.

‘Objetivo: Washington D.C.’: habrá bajas, pero serás tú


Los espectadores más jóvenes, aquellos que han crecido con la saga ‘Transformers’ o ‘Fast & Furious’, tal vez solo conozcan por referencias, o como cine «clásico», que hubo una época en la que el cine de acción era más artesanal que digital, en el que lo importante eran los personajes y una buena ejecución visual más que la espectacularidad de los efectos. Hoy en día es difícil encontrarlo, y precisamente por eso la saga protagonizada por Gerard Butler (Un hombre de familia) resulta tan refrescante en el panorama cinematográfico actual.

No es un alarde de originalidad. De hecho, Objetivo: Washington D.C. es bastante previsible (al villano «activo» se le identifica casi desde el principio, y al villano «en la sombra» un poco más tarde). Y sin duda, si alguien quiere buscarle la lógica a algunas de sus secuencias sencillamente va a fracasar. Pero eso es algo que va implícito en este tipo de historias. Superado eso, lo que nos encontramos es un relato sencillo, directo, cargado de humor, acción y efectividad que explota al máximo las posibilidades de sus actores y de sus escenarios, construyendo un crescendo dramático que utiliza buena parte de los recursos que ya se han demostrado efectivos en estas historias.

En este sentido, esta tercera parte de la saga tiene el aroma de otras cintas de aventuras y de acción de los años 80 y 90. Desde la traición del amigo hasta la presencia del padre que todavía puede enseñar algo a su hijo, la película bebe de numerosos referentes para revelarse como un entretenimiento puro, sin más ambición que la que puede tener cualquiera de las tres películas que conforman esta trilogía. Simplemente, sabe lo que es, ofrece lo que puede ofrecer y lo hace con honestidad y calidad en su propuesta. Tal vez no sea mucho para los estándares de hoy en día, pero desde luego logra dejar un buen sabor de boca con sus aciertos y sus fallos, que son muchos en ambos lados de la ecuación.

Desde luego, Objetivo: Washington D.C. tiene muchos errores, tanto en su desarrollo como en su planteamiento de guión. Y por supuesto, que nadie exija realismo. Pero Butler vuelve a demostrar el interés que despierta, cómo es capaz de acaparar toda la atención de cualquier historia por muy buenos actores que le rodeen. Carga sobre sus hombros el peso del relato, y es él el que es capaz de elevar el tono y la calidad del mismo en muchas ocasiones gracias a ese equilibrio que encuentra entre la ironía, la chulería y la gravedad de las situaciones que vive su personaje. La historia es simple, arquetípica y previsible. Pero es el tratamiento que necesita (en su gran mayoría al menos) para permitir que brillen otros aspectos de la trama. Y lograr ese delicado punto intermedio sigue siendo un arte al alcance de pocos. Como dice el personaje de Butler en un momento dado: «Habrá bajas, pero no serás tú».

Nota: 7/10

‘Un paseo por el bosque’ sin trascendencia antes de la guerra estelar


Estrenos 11diciembre2015Antes de que la fuerza, las naves espaciales y los sables láser irrumpan en el panorama cinematográfico de todo el mundo un buen puñado de cintas tratan de encontrar su hueco en la cartelera española. Un buen puñado, en efecto, aunque sin demasiada relevancia para el gran público. Posiblemente aquellos que busquen algo diferente tendrán en los estrenos de este viernes, 11 de diciembre, una buena excusa para acercarse a una sala de cine. Para el resto, la mejor alternativa tal vez sea volver a ver alguno de los numerosos blockbusters que inundan las pantallas. Comencemos el repaso por lo que llega de Estados Unidos.

Entre esos estrenos «diferentes» destaca Un paseo por el bosque, adaptación de la novela de Bill Bryson que narra el viaje que él mismo realizó por el sendero de los Apalaches, una ruta de más de 3.500 kilómetros de longitud. En su viaje deja atrás a su mujer y su familia, pero contará con la ayuda de un amigo que, después de huir de deudas toda su vida, es el único que parece estar dispuesto a acompañarle en esta aventura. El problema es que ambos tienen un concepto muy diferente de aventura. Humor y drama se combinan en esta cinta dirigida por Ken Kwapis (Qué les pasa a los hombres) y protagonizada por Robert Redford (Capitán América: El soldado de invierno), Nick Nolte (serie Gracepoint), Emma Thompson (Un golpe brillante), Mary Steenburgen (Criadas y señoras) y Nick Offerman (Infiltrados en la Universidad).

Y a medio camino entre el humor y el terror se encuentra el argumento de Bloodsucking Bastards, nuevo film de Brian James O’Connell (Angry white man) que sigue la anodina vida de un joven y obediente trabajador que, a pesar de su buen papel en la empresa, no consigue un ascenso. Lo mismo le ocurre a su novia y a su mejor amigo. Para colmo, su peor enemigo dentro de la compañía logra el ansiado ascenso. Pero su vida dará un giro cuando descubra el oscuro secreto que esconde su jefe. Joey Kern (Beneath), Joel Murray (serie Mad men), Pedro Pascal (serie Juego de Tronos), Fran Kranz y Emma Fitzpatrick (Before we go) encabezan el reparto.

La comedia también está presente en El asesinato de un gato, cinta de misterio y crimen producida en 2014 que arranca cuando el joven propietario de un gato decide investigar la muerte del animal. Acompañado por una mujer, las pistas poco a poco le llevarán a una conspiración en la que su mascota solo fue una pieza muy pequeña. Dirigida por Gillian Greene, quien debuta de este modo en el largometraje, la película está protagonizada por Blythe Danner (El profesor), Greg Kinnear (Un invierno en la playa), Aidan Andrews (The Preacher’s family), Fran Kranz (Before I disappear), Nikki Reed (serie Sleepy Hollow), J.K. Simmons (Whiplash) y Ted Raimi (Arrástrame al infierno).

Del mismo género es Dope, nuevo film de Rick Famuyiwa (La boda de mi familia) que aborda la vida de tres chicos de Los Ángeles que deben hacer malabares para sobrevivir en el conflictivo barrio en el que viven, lograr una plaza en la Universidad y disfrutar del hip-hop como modo de vida. Una fiesta a la que son invitados les ofrecerá una oportunidad para lograr todos sus sueños. El amplio reparto está encabezado por Blake Anderson (Ratko, el hijo del dictador), Kiersey Clemons (serie Transparent), Tony Revolori (Umrika), Shameik Moore (Joyful Noise) y Zoë Kravitz (Divergente).

Estados Unidos, junto a Canadá y Nueva Zelanda, produce Turbo Kid, propuesta de acción, aventura y ciencia ficción para los más jóvenes que transcurre en una realidad distópica en la que el mundo ha sido destruido. En el año 1997 un joven deberá poner a prueba su valentía y su ingenio para rescatar a su amiga del control del villano. Escrita y dirigida a seis manos por François Simard, Anouk Whissell y Yoann-Karl Whissell, en la que es la primera película largometraje para todos, cuenta en su reparto con Michael Ironside (Desafío Total), Laurence Leboeuf (La petite reine), Munro Chambers (Una fortuna muy perruna), Edwin Wright (Slow West) y Aaron Jeffery (Locks of love).

Pasamos ahora a los estrenos europeos, y lo hacemos con The salvation, western de 2014 que cuenta con capital danés, inglés, sueco, belga y sudafricano y en el que un hombre logra su venganza contra aquellos que asesinaron a su familia. El problema es que eso despierta la furia del cabecilla, lo que le obligará a buscar ayuda en un pueblo repleto de cobardes y traidores que no están dispuestos a arriesgar su vida así como así. Kristian Levring (The intended) es el encargado de poner en imágenes un guión en el que colabora, y que cuenta con un notable reparto encabezado por Mads Mikkelsen (serie Hannibal), Eva Green (serie Penny Dreadful), Jeffrey Dean Morgan (Watchmen), Michael Raymond-James (serie Érase una vez), Eric Cantona (De force) y Jonathan Price (Hysteria).

Italia, Francia y Reino Unido están detrás de El cuento de los cuentos, romance de fantasía con ciertas dosis de terror que dirige Matteo Garrone (Gomorra) y que adapta el libro de Giambattista Basile. Su trama se centra en varias intrigas palaciegas, entre las que destaca la de una reina celosa que conspira contra su marido, y la de un rey coartado por dos misteriosas hermanas. Dichos personajes son interpretados, entre otros, por Salma Hayek (El marido de mi hermana), Vincent Cassel (El niño 44), Toby Jones (Luces rojas), John C. Reilly (Un dios salvaje) y Alba Rohrwacher (El país de las maravillas).

La comedia tiene su máximo representante este fin de semana en Papá o mamá, producción francesa con tintes dramáticos y románticos que se centra en una familia modélica, en la que los padres tienen unos trabajos magníficos, los hijos son encantadores y el matrimonio es ejemplar. Al menos hasta que deciden divorciarse. Y es que, aunque tratan de que el proceso sea igual de exitoso, el simultáneo ascenso en sus respectivos trabajos desatará una guerra entre marido y mujer por ver quién se queda con la custodia. Ópera prima de Martin Bourboulon, el film cuenta en su reparto con Marina Foïs (Voy a ser mamá), Laurent Lafitte (Un golpe brillante), Anna Lemarchand (Du vent dans mes mollets), Alexandre Desrousseaux, Achille Potier y Judith El Zein (El nombre).

Desde Francia también nos llega La próxima vez apuntaré al corazón, adaptación del libro de Yvan Stefanovitch en el que un joven y modélico policía es puesto al frente de la caza y captura de un asesino en serie que está aterrorizando una zona rural del país. El problema es que él es el propio asesino. Thriller y drama se combinan en esta cinta de 2014 dirigida por Cédric Anger (L’avocat) y protagonizada por Guillaume Canet (En solitario), Ana Girardot (Cloclo), Patrick Azam (Le petit roi) y Jean-Yves Berteloot (Supercondríaco).

Entre los estrenos españoles destaca La novia, coproducida junto a Alemania y que gira en torno a un triángulo amoroso que se desarrolla a lo largo de años. Cuando la novia que da nombre a la película está a punto de casarse con un hombre al que no ama, una anciana se presenta ante su puerta para darle como regalo dos dagas de cristal y un consejo: «No te cases si no le amas». Será a partir de ese momento cuando los acontecimientos se precipiten. Paula Ortiz (De tu ventana a la mía) es la encargada de dirigir este drama en el que también colabora como guionista y que está basado en ‘Bodas de sangre’, de Federico García Lorca. El reparto está encabezado por Inma Cuesta (Tres bodas de más), Álex García (Kamikaze), Asier Etxeandia (Musarañas), Leticia Dolera (Requisitos para ser una persona normal) y Manuela Vellés (Al final todos mueren).

Muy diferente es Tercer grado, propuesta que mezcla acción, romance y drama y que arranca cuando un convicto, en el primer fin de semana de permiso tras más de cinco años en prisión, es testigo del robo a un furgón blindado. Su necesidad de rehacer su vida choca con los problemas que atraviesa su hermano, por lo que deberá tomar una decisión que cambiará su vida para siempre. Su única ayuda será una joven stripper que conoció la noche anterior. La cinta supone el debut en el largometraje de Geoffrey Cowper, y cuenta con un reparto liderado por Jesús Lloveras (La Rosi), Sara Casasnovas (Arriya), Javier Beltrán (Little ashes), Frank Feys (Orson West) y Miko Jarry (Marsella).

Otro estreno que llega con algo de retraso es Juana a los 12, drama coproducto entre Austria y Argentina que supone el debut en la dirección y en el guión de Martín Shanly. La trama gira en torno al proceso de madurez de una joven de 12 años que estudia en un instituto inglés privado de Buenos Aires. Alumna con buen rendimiento, cuando sus notas empiezan a bajar tanto sus profesores como sus padres empiezan a preocuparse, y aunque notan que algo pasa, la joven no quiere decirles lo que ocurre. Entre los actores principales destacan Mirta Bogdasarian (La cámara oscura), Rosario Shanly, Camila Dougall, María Inés Sancerni y María Passo.

El único título de animación de la semana es Coco, el pequeño dragón, adaptación de los cuentos infantiles que se centra en la relación entre el protagonista y su mejor amigo, dos dragones que no se ajustan a la naturaleza de sus semejantes: uno no puede volar, aunque se supone que ha nacido para ello, y el otro es un carnívoro que se ha vuelto vegetariano por elección propia. Producida en Alemania en 2014, la cinta está dirigida por Hubert Weiland (Lily la princesa hada y el pequeño unicornio) y Nina Wels, y cuenta con las voces de Max von der Groeben (Fack ju Göhte), Dustin Semmelrogge (El caballero Don Latón), Sarah Alles (Stilles Tal) y Sabine Falkenberg.

Entre los documentales destaca El hombre que quiso ser Segundo, ópera prima de Ramón Alòs que juega con la hipótesis de que Segundo de Chomón no haya tenido nunca un hermano gemelo. La trama se centra en un hombre que realiza un viaje por varios países de Europa siguiendo la estela del creador de la animación en España, y durante el que llegará a conocer los mayores secretos del realizador español. Ramón Langa (Sangre de mayo) y Enrico Vecchi (La fuerza del valor) encabezan el reparto.

Terminamos el repaso a las novedades con el documental futebol, producción española que tiene como telón de fondo el Mundial de Fútbol de Brasil celebrado en 2014. En ese contexto un joven brasileño decide regresar a su país natal para reencontrarse con su padre, al que no ve desde hace años, y compartir con él un mes de fútbol. Pero lo que parece un tiempo perfectamente planificado deja entrever poco a poco un peligroso ritual. El film está dirigido por Sergio Oksman (A esteticista).

‘Gracepoint’, intrascendente thriller por mal uso del género


David Tennant, Anna Gunn  y Nick Nolte son tres de los protagonistas de 'Gracepoint'.Un asesinato es el detonante para que los secretos de varios personajes, incluso un pueblo entero, salgan a la luz. La premisa argumental es casi tan vieja como el cine, y sin embargo ha funcionado muy bien en sus distintas adaptaciones. Al menos casi siempre. He de confesar que no he visto la serie Broadchurch, creada por Chris Chibnall (serie Camelot), pero tampoco creo que sea necesario para analizar Gracepoint, remake norteamericano escrito por el propio Chibnall y que cuenta también con David Tennant (serie Doctor Who) como protagonista. Es cierto que una comparación ayudaría a apreciar algunos detalles, pero lo cierto es que los trazos generales de la trama no requieren de referencias previas. En todo caso, solo serviría para confirmar que es peor que el original o que, como mucho, comete los mismos errores que el modelo británico.

Porque lo cierto es que esta nueva versión flaquea en casi todos sus aspectos. Desconozco si es por su intento de ser igual que el original hasta en la planificación (¿de verdad nadie se ha dado cuenta de que eso no funciona?) o simplemente porque el desarrollo dramático no está bien sustentado, pero lo cierto es que este thriller en el que todo un pueblo se ve golpeado por la muerte de un pequeño de 11 años no logra lo que se le presupone a todo thriller, y es una tensión narrativa que aproveche los ganchos de cada episodio para poner el listón un poco más alto. Más bien al contrario, la historia plantea una serie de premisas en su primer episodio, incluyendo a todos los sospechosos que irán pasando por el caso, que se resuelven en función de las necesidades de los creadores, y no de la propia historia.

Y para ejemplo un botón. Que una investigación policial no revise en sus primeros compases las comunicaciones del fallecido con amigos y gente cercana (vamos, que no se apoderen del ordenador y móvil del mejor amigo de la víctima) es algo no solo ilógico, sino que pone al espectador sobre una pista que no se resolverá hasta el final. Esto, en lugar de provocar la tensión dramática que ya explicó Alfred Hitchcock en su libro con Truffaut, lo que genera es cierto tedio, pues los sospechosos van pasando ante los ojos del espectador, quien sabe que los auténticos detonantes del caso policial no apuntan hacia ellos. De ahí que la sucesión de estos 10 episodios se haga excesivamente larga, obligando a una espera innecesaria que podría haberse resuelto de un modo más coherente.

Curiosamente, la resolución final de la serie deja una serie de conceptos dramáticos muy interesantes. La forma en la que se resuelve el crimen, los paralelismos familiares entre un sospechoso y el verdadero culpable, y las implicaciones sociales que tiene la verdad del caso en la pequeña comunidad (pequeña, sí, pero tiene hasta un periódico), dejan un remanente de reflexiones a cada cual más atractiva, desde el concepto de juez, jurado y verdugo que tiene el ser humano ante determinadas situaciones, hasta la repulsa que genera descubrir los secretos más oscuros de aquellos a los que amamos y creemos conocer. Ideas que, por desgracia, solo se explotan en los últimos compases de la trama, dejando para el grueso de la temporada un concepto más tradicional y manido de este tipo de thriller.

Lo que hace un buen reparto… y uno malo

Pero la apuesta dramática de Gracepoint no es lo único que se tambalea en la serie, cancelada después de una temporada. El reparto es igualmente responsable. En líneas generales, los actores seleccionados, sobre todo los principales, han dado sobradas muestras de su capacidad interpretativa en otros trabajos. Sin embargo, una historia como esta, con la carga emocional que conlleva y los conflictos personales que genera, exige otra cosa. No más, ni mejor; simplemente, otra cosa. Y eso es lo que no se consigue, al menos no siempre. Desde luego ni Tennant ni Anna Gunn (serie Breaking Bad) salen mal parados, aunque ambos parecen sometidos a personajes manidos, ya vistos en otras series (incluida la propia Broadchurch).

Quizá lo que menos encaja en el conjunto sea la pareja formada por Virginia Kull (serie Boardwalk Empire) y Michael Peña (Marte), a la sazón padres del pequeño asesinado. Ni su química en pantalla permite hacer creíble la familia formada, ni ellos mismos poseen las herramientas adecuadas para explotar al máximo estos roles. No quiero decir con esto que sean malos actores, sino simplemente que su elección tal vez no hay sido la más adecuada (o no han sido bien dirigidos, que también es posible). Las limitaciones dramáticas de Peña, unidas a la situación que vive su personaje, generan una suerte de contraste que no termina de encajar en el contexto, aunque es justo reconocer que a medida que sus secretos se desvelan adquiere algo, no mucho, de significado.

En realidad, el problema con el reparto está muy relacionado con el principal problema de la serie, que es la forma en que se desarrollan los acontecimientos. En todo momento da la sensación de que la historia debería ir por otros derroteros, abandonados en favor de una teórica necesidad de mantener el suspense en torno a esos tradicionales secundarios que sirven únicamente para distraer al espectador. Esto obliga a los protagonistas a actuar muchas veces en contra de su propia naturaleza, o al menos en contra de aquello que se les presupone. Y si añadimos el hecho de que la trama ofrece información que luego ignora durante la mayoría de los episodios, el resultado es una cierta frustración.

Frustración porque Gracepoint insinúa una muy buena historia detrás del tratamiento, que podría ser algo más de lo que finalmente es. La versión norteamericana de Broadchurch viene a confirmar que los remakes no pueden, en ningún caso, ser iguales que el original, mucho menos en su forma de contar la historia. Posiblemente sea por esto que la serie ha sido cancelada tras su primera temporada, mientras que el original británico ya va por su tercera entrega. Pero el problema no es solo el remake en sí. La ficción no trata como debería los pilares del género, llevando la historia por caminos que muchas veces no parecen ser los correctos. Y eso termina por convertir esta serie en algo convencional, tan correcto como intrascendente.

‘Pacto de silencio’: acuerdo implícito de confidencialidad


Robert Redford dirige y protagoniza 'Pacto de silencio'.A primera vista todo parece perfecto. Un thriller con un punto de partido interesante, una implícita (y explícita) crítica social al capitalismo, a la protesta violenta de grupos radicales y a las actuales injusticias generadas por la crisis financiera, y un reparto de verdadero lujo. Como digo, lo tiene todo para ser un film interesante, de esos que ponen sobre la mesa una serie de naipes que pocos, o ninguno, se atreven si quiera a susurrar al oído. Pero el nuevo trabajo de Robert Redford como director tras La conspiración (2010) es eso, una premisa. Buena, pero una premisa al fin y al cabo.

Y lo cierto es que provoca más indignación que otra cosa. El guión de Lem Dobbs (Indomable) peca de excesiva confidencialidad para con el espectador, o mejor dicho de confianza en él. La historia, desarrollada claramente en dos líneas dramáticas que corren paralelas hasta el desenlace final, se queda en todo momento a medio camino entre lo que muestra y lo que presupone, entre lo que explica y lo que deja al espectador para completar. El problema es que el personaje encargado de armar todos los detalles de esta intriga, encarnado con solidez por Shia LaBeouf (Transformers), se encuentra casi en la misma tesitura que el espectador, con una diferencia: tiene a su alcance información privilegiada. O al menos eso es lo que se desprende de que, secuencia tras secuencia, sea la voz explicativa de deducciones e investigaciones a las que la cámara de Redford no tiene (o no quiere tener) acceso.

Más que incrementar el suspense o el drama, lo que esto provoca es un desconcierto que obliga al espectador a un doble juego de atención e imaginación. Sí, muchos de los secretos desvelados se presumen mucho antes de que sean mostrados, pero ese no es el problema, o al menos no el más destacable. La verdadera carencia del film reside en su forma de contar las deducciones de un periodista que tan pronto persigue a un fugitivo como inicia una conversación en la que revela todo lo que ha descubierto… sin haberlo descubierto. Como digo, una lástima. Visualmente, la película posee la sobriedad y elegancia que caracterizan al actor y director de Leones por corderos (2007), y el impresionante plantel de actores es irreprochable.

Pero Pacto de silencio se mantiene, como su propio nombre indica, en silencio durante demasiado tiempo. El guión, en un loable afán de generar intriga, no mide bien los tiempos ni las informaciones y termina por ser excesivamente opaco, excesivamente parco en su forma de mostrar la concatenación de descubrimientos que llevarían al mismo desenlace. El hecho de que, además, existan tantos personajes que aparecen y desaparecen a lo largo de la trama impide desarrollar algunas tramas secundarias que merecerían algo más de atención. Es un quiero y no puedo: se quiere plantear algo muy atractivo, pero no se puede conseguir el desarrollo dramático que merece.

Nota: 6/10

Thor y Gordon-Levitt lideran un fin de semana cargado de estrenos


Estrenos 31octubre2013Muchos son los estrenos que conforman el pistoletazo de salida de noviembre en España. En un fin de semana alargado por la festividad de Todos los Santos, hasta 11 películas se presentan en las salas de cine de todo el país hoy jueves, 31 de octubre, y muchas de ellas esperadas. Algunas representan los últimos coletazos de los estrenos veraniegos, otros se ajustan más a lo que esta época del año suele ofrecer en cuestiones cinematográficas. Todos ellos comparten, sin embargo, numerosas características en común: la presencia de actores muy conocidos y el regreso de algunos nombres propios que han definido el cine de los últimos años (y décadas). Y dado que hay que empezar por alguno, qué mejor que hacerlo con un superhéroe.

Ya no está Kenneth Branagh (Valkiria) tras las cámaras, pero sí el resto del reparto original de Thor (2011) en la primera de las continuaciones sobre el famoso personaje superheróico/divino de Marvel. Bajo el título Thor: El mundo oscuro, la película cuenta cómo el famoso dios nórdico debe enfrentarse a una antigua raza a la que ni siquiera su padre, Odín, ha podido derrotar. Una raza que amenaza con sumir todo el universo en la más absoluta oscuridad, incluyendo la Tierra y a su amada. Nuestro héroe se verá obligado a sacrificar todo lo que ha conocido, todo lo que ha querido, para tener alguna posibilidad de encontrar un futuro. Acción, humor y el sello de la casa que alumbró al personaje en las páginas de los cómics son los sellos de identidad. Y sí, la dirección cambia de manos, siendo Alan Taylor (Mi Napoleón) el nuevo responsable, pero como decimos el reparto repite. Así, encontraremos entre otros a Chris Hemsworth (Rush), Natalie Portman (Brothers), Tom Hiddleston (The deep blue sea), Stellan Skarsgård (Millennium: Los hombres que no amaban a las mujeres), Anthony Hopkins (Hitchcock), Rene Russo (Arma letal 4), Idris Elba (Pacific Rim), Kat Dennings (Una conejita en el campus), Ray Stevenson (Los otros dos) y Jaimie Alexander (El último desafío).

Don Jon es el título de la ópera prima del actor Joseph Gordon-Levitt (Looper), quien escribe, dirige y protagoniza esta trama que actualiza la figura del Don Juan, teniendo como personaje principal a un hombre cuya vida transcurre entre gimnasios, mujeres y pornografía, y que intentará reformarse al conocer a la que considera la mujer de su vida. Con un marcado tono cómico, la película ha recibido elogios allá por donde ha pasado. Junto al actor y director encontramos también a Scarlett Johansson (The Spirit), Julianne Moore (Un hombre soltero), Tony Danza (Crash) y Glenne Headly (El buen nombre).

Otro de los estrenos interesantes del fin de semana, al menos por los nombres que lo avalan, es Sólo Dios perdona, thriller con tintes dramáticos escrito y dirigido por Nicolas Winding Refn, director de Drive (2011), y co producido entre Estados Unidos, Francia, Tailandia y Suecia. La historia se adentra en el mundo de los suburbios, las drogas, la prostitución y el boxeo en Bangkok tomando como eje a un prófugo de la justicia norteamericana que deberá vengar la muerte de su hermano a petición de su madre, después de que fuera asesinado por masacrar a una joven prostituta. El fugitivo se verá envuelto en una espiral de violencia en la que cada nuevo paso le hundirá en los rincones más oscuros de la sociedad. Protagonizada por Ryan Gosling (Cruce de caminos), la película cuenta también con Kristin Scott Thomas (En la casa), Vithaya Pansringarm (Trade of innocents), Tom Burke (The kid) y Gordon Brown (Man to man).

Del 2012 es nuestra siguiente propuesta, dirigida e interpretada por Robert Redford (Leones por corderos). Pacto de silencio es un thriller en el que un abogado experto en derechos civiles y padre de una hija verá cómo su vida se derrumba cuando un periodista desvele que su pasado no fue tan monótono como su actual vida. Durante su juventud el experimentado abogado fue un radical antibelicista y fugitivo buscado por asesinato. Perseguido por el FBI, el hombre iniciará una carrera contrarreloj por todo el país para encontrar a la única persona que podría limpiar su nombre. A Redford le acompaña un reparto realmente extenso e interesante: Shia LaBeouf (Transformers), Julie Christie (Troya), Susan Sarandon (El fraude), Nick Nolte (Warrior), Chris Cooper (American Beauty), Terrence Howard (Iron Man), Stanley Tucci (Burlesque), Richard Jenkins (Los diarios del ron), Anna Kendrick (Up in the air), Brendan Gleeson (Albert Nobbs) y Sam Elliott (Gracias por fumar).

Con más retraso llega Hojas de hierba, producción estadounidense de 2009 escrita y dirigida por el actor Tim Blake Nelson (O Brother!), quien también se reserva un papel. A medio camino entre la comedia dramática y el thriller, el argumento se centra en dos hermanos gemelos diametralmente opuestos. Uno es profesor de filosofía; el otro es un criminal cuya presencia en la vida de su hermano obligará al primero a tomar decisiones peligrosas para su estilo de vida y para su integridad física. Edward Norton (El velo pintado) es el gran protagonista de la historia, pero no es el único rostro conocido. Lucy DeVito (Just add water), Melanie Lynskey (serie Dos hombres y medio), Susan Sarandon, que hace doblete el fin de semana, Keri Russell (La camarera), Richard Dreyfuss (Poseidón) y Maggie Siff (serie Hijos de la Anarquía) completan el reparto.

Dejamos Estados Unidos para quedarnos con los estrenos españoles, entre los que destaca Vivir es fácil con los ojos cerrados, nueva película escrita y dirigida por David Trueba (Soldados de Salamina) que se enmarca en la década de los 60 del siglo pasado y que tiene como protagonista a un profesor de inglés seguidor de los Beatles quien, al enterarse de que John Lennon está rodando una película en Almería, inicia un viaje para conocerle. Durante el camino recogerá a un joven que se ha escapado de casa y a una chica que parece huir de algo, surgiendo entre los tres una amistad muy especial. El drama está protagonizado por Javier Cámara (Los amantes pasajeros), Francesc Colomer (Pa negre), Natalia de Molina (Temporal), Ariadna Gil (El laberinto del fauno), Jorge Sanz (La niña de tus ojos) y Ramón Fontserè (Madrid, 1987).

Otra de las propuestas españolas es Al final todos mueren, comedia que mezcla la ciencia ficción, el drama y el romance en cuatro historias diferentes que tienen como nexo de unión el inminente impacto de un meteorito que terminará con la vida en la Tierra. Al igual que otros films similares, cada uno de los fragmentos cuenta con un reparto propio y una dirección diferente. Los que se ponen tras las cámaras son Javier Botet (Mamá), David Galán Galindo, Roberto Pérez Toledo (los tres debutantes en el largometraje) y Pablo Vara (DHA: Dos horas antes). Además, Javier Fesser (Camino) se encarga de las secuencias iniciales y finales. Por su parte, en el reparto aparecen nombres como Manuela Vellés (Retornos), Elisa Mouliaá (serie Borgia), Macarena Gómez (Carne de neón), Andrea Duro (Promoción fantasma), Miguel Ángel Muñoz (Lope) y el propio Botet.

Mirando hacia Europa, dos películas francesas llegan a la cartelera. El viaje de Bettie es un drama que arranca cuando la protagonista ve cómo su vida se desmorona: su amante la abandona y el restaurante familiar peligra. Ante esto, lo que comienza siendo un paseo en coche para despejar las ideas se convierte en un viaje en el que se reencontrará con su hija y surgirán las posibilidades de un nuevo amor. Dirigida por Emmanuelle Bercot (Clément). quien también participa en el guión, la película cuenta con Catherine Deneuve (La chica del tren) como principal protagonista, a la que acompañan Nemo Schiffman (Backstage), Gérard Garouste, Camille (Les morsures de l’aube) y Claude Gensac (Coursier).

Por otro lado, El postre de la alegría (Paulette) es la nueva película de Jérôme Enrico (L’origine du monde), una comedia dramática cuya protagonista, una anciana gruñona y racista, encuentra la solución a sus problemas económicos al toparse con un paquete de hachís. Aunque al principio decide venderlo en pequeñas dosis, la presión de los camellos de la zona en la que vive la obliga a destinar la droga a otros fines: condimento para unos pasteles que prepara con sus amigas y que harán volar a sus clientes. El reparto está integrado por, entre otros, Bernadette Lafont (Bazar), Carmen Maura (Tetro), Dominique Lavanant (Madame Edouard), Françoise Bertin (Juntos, nada más) y André Penvern (La vida en rosa).

En cuanto a la animación, Doraemon y Nobita Holmes en el misterioso Museo del Futuro es el único título que llega hoy viernes. Basado en los personajes de la famosa serie de televisión japonesa, el argumento del film da inicio cuando un ladrón roba el cascabel de Doraemon mientras este duerme. Para encontrarlo le da a su amigo Nobita un disfraz de detective «sherlockiano» con el que reunir pistas. Sin embargo, estas les llevarán a un museo en el siglo XXII, donde deberán enfrentarse a personajes con numerosos secretos. Dirigida por Wasabi Mizuta, director muy relacionado con el personaje, la película cuenta con las voces en la versión original de Megumi Oohara, Yumi Kakazu y Subaru Kimura.

Finalmente, un documental. Blackfish narra la historia de Tilikum, una orca que vive en cautividad y que ha matado a varias personas a lo largo de todo este tiempo. A través de emotivas entrevistas e impactantes imágenes la directora Gabriela Cowperthwaite (City Lax: An Urban Lacrosse Story) construye un relato que explora no solo la naturaleza de estos animales, sino cómo es su vida en cautividad, la vida de sus cuidadores y las presiones que ejerce la industria de los parques acuáticos.

‘Anna Karenina’ se enfrenta a un caza gigantes de cuento


Estrenos 15marzo2013.Ya lo hemos comentado alguna vez en este blog. Si el invierno suele ser la época idónea para el estreno de títulos de mayor calidad, nominados a todos los premios habidos y por haber y con unos repartos de auténtico lujo, la primavera suele ser una época de transición entre dichas producciones y las destinadas a reventar las taquillas de todo el mundo. Las novedades de hoy, viernes 15 de marzo, son buena prueba de ello. Muchos títulos, en efecto, pero todos ellos (o al menos la gran mayoría) muy interesantes desde diversos puntos de vista.

Puede que el más atractivo para el público en general sea Anna Karenina, lo nuevo de Joe Wright como director y de Keira Knightley como actriz, en la que es su tercera colaboración juntos tras Orgullo y prejuicio (2005) y Expiación. Más allá de la pasión (2007). Adaptación de la novela de León Tolstói, la historia comienza cuando la protagonista, esposa de un alto cargo dentro del régimen imperial, realiza un viaje para mediar en los problemas conyugales de su hermano, quien le ha sido infiel a su esposa. Su vida dará un vuelco cuando, durante el trayecto, conozca a un joven conde con el que inicia una relación. De elevada factura técnica y artística, este intenso drama cuenta con numerosos rostros conocidos que se suman al de Knightley, como son Jude Law (Contagio), Aaron Taylor-Johnson (Salvajes), Matthew Macfadyen (Un funeral de muerte), Kelly Macdonald (serie Boardwalk Empire), Olivia Williams (El sexto sentido) y Emily Watson (War horse).

Competidora directa por los primeros puestos de la taquilla es Jack el caza gigantes, adaptación del famoso cuento de las habichuelas mágicas que sigue la estela de adaptaciones «adultas» de historias infantiles. En esta ocasión se narra la guerra que se desencadena entre humanos y gigantes después de que un granjero abra la puerta entre los dos mundos sin darse cuenta, por supuesto plantando una habichuelas mágicas. El joven deberá luchar no solo por su vida, sino por el mundo que conoce y por el amor de una princesa. Acción, aventura y comedia se mezclan bajo la tecnología 3D, todo dirigido con mano firme por Brian Singer, quien vuelve a la pantalla grande tras Valkiria, hace cinco años. Frente a la cámara encontramos a Nicholas Hoult (X-Men: Primera generación), Ewan McGregor (Trainspotting), Eleanor Tomlinson (Alicia en el país de las maravillas), Stanley Tucci (Un plan perfecto), Eddie Marsan (Redención), Ewen Bremmer (Conocerás al hombre de tus sueños), Ian McShane (Piratas del Caribe. En mareas misteriosas) y Bill Nighy (Desafío Total).

Un carácter algo menos comercial poseen los siguientes tres estrenos. El primero, El chico del periódico, es la adaptación de la novela de Peter Dexter, quien también es autor del guión a cuatro manos con el director de la cinta, Lee Daniels (Precious). La trama gira en torno a dos hermanos, uno de ellos periodista de un prestigio diario de Miami, que investigan la historia de una misteriosa mujer aficionada a escribirse con condenados en el corredor de la muerte. Dicha historia se centra en uno de dichos condenados que, según ella, está esperando su ejecución por un crimen que no cometió. Desde luego, lo más llamativo del film es su reparto, plagado de estrellas: Zac Efron (High School Musical), Matthew McConaughey (Magic Mike), Nicole Kidman (Bajo Amenaza), John Cusack (El enigma del cuervo), David Oyelowo (Criadas y señoras) y Scott Glenn (Noches de tormenta).

También con un reparto muy conocido, más entre el sector más joven que entre los espectadores adultos, nos llega Spring breakers, cinta transgresora y provocativa que cuenta la historia de cuatro chicas que, para disfrutar de unas vacaciones de primavera, deciden atracar un establecimiento y conseguir dinero. Este acto será el principio de un viaje que les llevará a encontrar protección bajo el ala de un matón. Escrita y dirigida por Harmony Korine (Mister Lonely), el reparto está integrado por James Franco (Caballeros, princesas y otras bestias), Selena Gomez (Ramona y su hermana), Ashley Benson (serie Pequeñas mentirosas), Vanessa Hudgens (Sucker Punch), Rachel Korine (Septien) y Heather Morris (serie Glee).

Josh Radnor, protagonista de la serie Cómo conocí a vuestra madre, vuelve al cine tras su ópera prima, Happythankyoumoreplease, con una comedia romántica de título Amor y letras. La historia gira en torno a un joven que, desencantado con su trabajo, vuelve a su antigua universidad para la cena de jubilación de su profesor favorito. Durante su estancia allí conocerá a una joven de 19 años con la que iniciará un romance que deberá enfrentarse a numerosos problemas. Director, guionista y protagonista, Radnor está acompañado por Elizabeth Olsen (Luces Rojas), Richard Jenkins (Déjame entrar), Allison Janney (La hija de mi mejor amigo) y Zac Efron, quien duplica estreno junto a El chico del periódico.

España queda representada en dos títulos. El primero de ellos es el drama A puerta fría, dirigida por Xavi Puebla (Noche de fiesta) y con la participación de un veterano como Nick Nolte (Gangster Squad). El argumento arranca cuando un antiguo vendedor estrella comienza a replantearse su vida al comprobar que el trabajo que tantos éxitos le deparó en el pasado le deja de lado por nuevas y atractivas generaciones de hombres capaces de vender más que él. La película cuenta con la presencia, además de Nolte, de Antonio Dechent (La voz dormida), María Valverde (La mujer del anarquista), Sergio Caballero (En fuera de juego), Héctor Colomé (Flores negras) y José Ángel Egido (Pájaros de papel), entre otros.

Otro drama, aunque esta vez producido en Argentina, es Días de pesca en Patagonia, que gira en torno a la llegada de un ex alcohólico a un pequeño pueblo argentino para desintoxicarse mediante la práctica de una afición como la pesca. El conflicto surgirá por la presencia de la hija, a quien hace años que no ve debido precisamente a que ella se refugió en dicha localidad. Escrita y dirigida por Carlos Sorin (Historias mínimas), el reparto está integrado en su mayoría por rostros noveles y desconocidos, aunque hay hueco para algún veterano, como es el caso de Alejandro Awada (Nueve reinas). Junto a él, Victoria Almeida (La última mirada), Oscar Ayala, Diego Caballero, Daniel Keller y Martín Galindez.

Si nos centramos en el género documental, sin duda uno de los más interesantes es Mundo pequeño, la otra producción española que llega a nuestras pantallas. Dirigida por Marcel Barrena, esta producción de no ficción sigue los pasos del joven Albert, cuyo único sueño es viajar por todo el mundo y poder llegar al punto más alejado de su casa. Lo novedoso estriba en la forma de hacerlo: sin dinero, sin compañía, sin equipaje y sin separarse de su silla de ruedas, con la que convive desde que era pequeño.

También en el documental, aunque esta vez combinado con la animación, nos encontramos con Pequeñas voces, producción colombiana del 2010 que se ha convertido en un claro alegato contra la violencia. Escrito y dirigido por Jairo Eduardo Carrillo (Dios los junta y ellos se separan), a través de los testimonios de cuatro niños que han vivido la violencia y la guerra de guerrillas (uno de ellos incluso llegó a combatir en la selva) el espectador vive en su piel la crudeza de una violencia que los jóvenes no entienden y que les inspira verdadero terror.

Para concluir, The art of flight 3D, producido en 2011 en Estados Unidos, supone el mayor documental realizado hasta la fecha sobre snowboard. Bajo la dirección de Curt Morgan (Red Bull Young Jaws), y con la participación de famosos especialistas de este deporte como Travis Rice, la película demuestra que los límites de la física y de la resistencia humana pueden ponerse a prueba, y que pueden permitir realizar auténticas proezas en las montañas más espectaculares del mundo.

Trailer de ‘Gangster Squad’, mafia con referencias cinéfilas


El ascenso meteórico que ha sufrido la carrera de Ryan Gosling (Los idus de marzo) solamente es comparable, ahora mismo, a la de Michael Fassbender. Y si el protagonista de Shame parece centrarse más en personajes complejos emocional y psicológicamente hablando, el primero opta por un tipo de papel más sencillo a primera vista pero con un recorrido narrativo amplio y complicado, lo que le ofrece la oportunidad de desarrollar sus cualidades como intérprete. Su nuevo trabajo se llama Gangster Squad, del que podréis encontrar el trailer más adelante. Emma Stone (Crazy, Stupid, Love), Josh Brolin (Valor de ley), Sean Penn (Un lugar donde quedarse), Giovanni Ribisi (Los diarios del ron) o Nick Nolte (Hulk) son algunos de los múltiples rostros conocidos que acompañan a Gosling.

Y si bien la cinta se nutre argumentalmente de la historia verídica de un grupo secreto de la policía de Los Ángeles y su lucha en los años 40 y 50 contra la mafia y, en concreto, contra Meyer Harris ‘Mickey’ Cohen, visualmente toma prestados elementos de numerosos films clásicos y modernos, y de series de televisión. Vaya por delante que el estilo formal del proyecto lleva el sello inconfundible de Ruben Fleischer, director que dio el pelotazo hace unos años con la divertidísima Bienvenidos a Zombieland. Algunos planos vistos en el trailer, como la cámara lenta, los cenitales o un tono algo irónico en algunos momentos han podido verse en algunas de sus películas.

Pero lo que llama poderosamente la atención en el nutrido grupo de referentes fotográficos y visuales que posee el film. Sin duda, para aquellos que la hayan visto, L. A. Confidential puede que sea el primer título en el que piensan, incluso argumentalmente en algunos aspectos. Ese aire clásico, elegante y al mismo tiempo de los bajos fondos, así como una iluminación tenue en la que predominan los ocres y los colores fríos hacen pensar inevitablemente en la obra de Curtis Hanson. Incluso el reparto es tan impresionante como el de aquel, salvando por supuesto las distancias temporales.

Boardwalk Empire

Con todo, puede que la mayor influencia llegue de la mano de un maestro en este género. En efecto, el ambiente de los locales que se pueden ver en estas primeras imágenes, unido a la actitud de los amos del crimen y a la obsesión de la policía por darles caza hacen pensar en Boardwalk Empire, esa joya de la pequeña pantalla que ha creado Martin Scorsese. Claro que la serie está contada desde el punto de vista de los mafiosos, por lo que la atención de la película sin duda abordará más los conflictos que surjan entre los policías por sus decisiones personales y profesionales.

En este sentido, Gangster Squad desprende la sensación de contener una violencia poética similar a la que tienen los capítulos protagonizados por Steve Buscemi (Fargo). Aunque no cabe duda de que las escenas de acción serán un elemento muy importante, la forma de tratar dichos momentos, a priori, permiten pensar en un enfoque serio, adulto y algo lírico que le acerca más a la serie que a otras formas de ver el mundo de la mafia.

Ryan Gosling vuelve al crimen con este film después de estrenar hace no demasiado la magnífica Drive. Tras un primer vistazo, sus personajes difieren notablemente en lo que a actitud se refiere, no así en la violencia que ejercen para lograr sus objetivos. El estreno en Estados Unidos está previsto para el 7 de septiembre, mientras que en España podremos verla el 9 de noviembre. Hasta ese momento, aquí tenéis el trailer.

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