‘Furiosa: De la saga Mad Max’: el árbol de la venganza
28/05/2024 Deja un comentario
Cuando en 2015 George Miller recuperó la saga Mad Max con Furia en la carretera, algo cambió. No es que el cine no hubiera avanzado desde que en 1985 se estrenara la tercera entrega, Más allá de la cúpula del trueno, pero la apuesta que hizo Miller supuso un punto y aparte en la saga y en el cine. Hasta el punto de generar expectación con una precuela de un personaje secundario. Y la apuesta sigue saliendo perfecta, aunque con sus diferencias, claro está.
Furiosa: De la saga Mad Max es uno de esos productos que tienen vida gracias al éxito de otro film, pero cuyo desarrollo y calidad son exclusivamente suyos. Vamos, que puede verse sin necesidad de conocer nada del universo previo… ni siquiera los clásicos protagonizados por Mel Gibson. El film, mucho más complejo narrativamente hablando que Furia en la carretera, tiene todos los elementos que han convertido a esta saga en una de las más interesantes en lo que a cine postapocalíptico se refiere. Sus personajes se alejan de definiciones arquetípicas para mostrarse como seres complejos, llevados por el odio y la codicia en un mundo muerto. Incluso aquellos secundarios menos definidos plantean matices que invitan a pensar en lo que se esconde bajo la superficie.
Pero ante todo, es un espectáculo con alma. Si la cinta protagonizada por Tom Hardy (Venom: Habrá matanza) era un desenfrenado relato de acción que no levantaba el pie el acelerador en ningún momento, Miller apuesta aquí por una trama más pausada, construida en torno a la evolución de una protagonista a la que Anya Taylor-Joy (Ámsterdam) da vida de forma magistral, aunando en su actuación la complejidad de un personaje inteligente con la sencillez de su motivación, que no es otra que la venganza, como ya lo fuera en los orígenes de la saga. El director aprovecha lo aprendido en la anterior película para dotar al film de una estética visualmente impactante, con algunos momentos sencillamente épicos en los que los planos generales aportan la grandilocuencia de unas secuencias de acción tal vez con menos adrenalina que en otras ocasiones, pero en todo caso brillantes.
Miller logra con Furiosa: De la saga Mad Max una obra épica, un espectáculo visual que debe ser visto y disfrutado en pantalla grande. El director demuestra no solo su experiencia en desarrollar su saga, sino su maestría a la hora de encontrar el equilibrio entre una narración sólida con unos giros argumentales bien construidos (el único ‘pero’ de la película podría ser que hay algunos momentos excesivamente lentos, pero tienen su explicación) y la adrenalina que imprime a las persecuciones y secuencias de acción. Y como el árbol al que siempre se hace referencia en la historia, la película crece fuerte y robusta desde un inicio prometedor hasta un final que recuerda que las ramas entroncan directamente con la historia de Furia en la carretera. Hablando de esto, y aunque solo sea como mención, siempre es interesante ver a Chris Hemsworth (Thor: Love and Thunder) haciendo de villano. Si Miller quiere, tendremos Mad Max para rato, sea con el protagonista que sea.
Nota: 8/10