Bayona reina en unos Goya injustos con un buen año de cine español
11/02/2024 Deja un comentario
Se dice que la mera nominación a unos premios ya es un premio en sí. Evidentemente, todo el mundo quiere ganar, pero en general, estar entre lo mejor de un año suele ser una recompensa para el trabajo bien hecho. Ahora bien, cuando en una gala como los Premios Goya todo, absolutamente todo, va a parar a las mismas manos, algo raro pasa. Nunca he sido partidario de que una película arrase, por motivos profesionales, éticos y cinematográficos. Y por mucho que considere que La sociedad de la nieve es una joya del cine español, este ha sido un año en el que deberían haber brillado con la misma intensidad otros títulos que han quedado relegados a algo testimonial.
Como es habitual, en este pequeño espacio vamos a centrarnos más en la parte cinematográfico de estos 38 Premios Goya que en la gala en sí, para la que ya ha habido todo tipo de comentarios a favor y en contra (personalmente, solo diré que los Javis son directores y guionistas por algo, así que el tema de cantar y actuar que se lo dejen a Ana Belén y a profesionales que sí saben lo que hacen). Y cinematográficamente hablando, la gala fue un pequeño desastre casi desde el principio. Daba la sensación, ya desde los primeros compases, que más que una entrega de premios, lo que vimos en Valladolid era una especie de homenaje a la mastodóntica producción dirigida por J.A. Bayona (Jurassic World: El reino caído). Categoría en la que participaba La sociedad de la nieve, categoría en la que conseguía un cabezón. Tuvimos que esperar a la categoría de Guion Adaptado para ver la única derrota, llevándose el premio Pablo Berger por su Robot dreams.
Y a pesar de la agilidad con la que se desarrolló la gala, esto lo único que hace es que se pierda el interés en una ceremonia que, en teoría, premia lo mejor del cine español del año. ¿De verdad que lo único que podía premiarse era La sociedad de la nieve? Resulta muy indignante que 20.000 especies de abejas, por ejemplo, solo haya obtenido premios en aquellas categorías donde no competía con la película de Bayona. O que una joya visual, narrativa e interpretativa como Saben aquell solo haya obtenido el más que merecido Goya para su protagonista, David Verdaguer (Hogar). Da la sensación de que solo se ampliaba la mirada al resto del cine español en aquellas categorías en las que la historia de supervivencia en los Andes no podía competir. Y eso es muy injusto con la calidad de unas películas y un cine hecho en España cada vez más profesional y de un nivel exquisito.
Dicho esto, creo que la Academia tenía una deuda pendiente con Bayona, y la ha saldado. Posiblemente sea el director más internacional actualmente de nuestro panorama cinematográfico, y sin duda, uno de los realizadores más interesantes, con un lenguaje audiovisual tan claro como hermoso a la par que épico y espectacular. Algo que le ha permitido, por ejemplo, participar en una de las mayores sagas de los últimos tiempos y marcar el paso narrativo y conceptual de series como Penny Dreadful y El señor de los anillos: Los anillos de poder, y colaborar con actores y actrices como Sigourney Weaver (Un monstruo viene a verme), quien por cierto protagonizó uno de los momentos más emotivos de toda la gala y demostró una categoría que no se tiene en España al compartir el premio con su dobladora durante décadas, dignificando con un sencillo acto una profesión que ni siquiera tiene cabida en los Goya.
En líneas generales, unos Goya que se volvieron muy previsibles y tediosos. Viendo el desarrollo de los premios, más allá de los números musicales (¿por qué no se cantan las canciones nominadas?), de discursos cargados de reivindicaciones y respuestas políticas, y de homenajes cuestionables, la sensación que deja esta 38 edición es la de reconocer, alabar y premiar la película que nos representa en los Oscar que se celebrarán en unas semanas. Pero el cine español es mucho más rico que todo eso. Por mucho que pueda defender La sociedad de la nieve, nunca entenderé que una película acapare todos los premios. Se supone que una película que gana Mejor Película y Mejor Director se reconoce, aunque sea implícitamente, que todos los departamentos que trabajan en ella han realizado una labor inolvidable. Ir premiando cada departamento, dejando de este modo al resto de candidatas fuera de toda posibilidad, es algo que no entenderé nunca. Claro que más raro sería haberle dado todos los premios y luego dejarla sin el principal.
A continuación, os dejamos el listado de premiados.
Ganadores de la XXXVIII edición de los Premios Goya
Mejor película: La sociedad de la nieve
Mejor dirección: Juan Antonio Bayona, por La sociedad de la nieve
Mejor actor protagonista: David Verdaguer, por Saben aquell
Mejor actriz protagonista: Malena Alterio, por Que nadie duerma
Mejor película europea: Anatomía de una caída (Francia)
Mejor película iberoamericana: La memoria infinita, de Maite Alberdi (Chile)
Mejor actor de reparto: Jose Coronado, por Cerrar los ojos
Mejor actriz de reparto: Ane Gabarain, por 20.000 especies de abejas
Mejor película de animación: Robot Dreams, de Pablo Berger
Mejor película documental: Mientras seas tú, el aquí y ahora de Carme Elias, de Claudia Pinto
Mejor guion adaptado: Pablo Berger, por Robot Dreams
Mejor guion original: Estibaliz Urresola, por 20.000 especies de abejas
Mejor dirección de arte: Alain Bainée, por La sociedad de la nieve
Mejor montaje: Andrés Gil y Jaume Martí, por La sociedad de la nieve
Mejor dirección de fotografía: Pedro Luque, por La sociedad de la nieve
Mejor cortometraje de animación: To bird or not to bird, de Martín Romero
Mejor cortometraje documental: Ava, de Mabel Lozano
Mejor cortometraje de ficción: Aunque es de noche, de Guillermo García López
Mejor música original: Michael Giacchino, por La sociedad de la nieve
Mejor canción original: ‘Yo solo quiero amor’, de Rigoberta Bandini, por Te estoy amando locamente
Mejor dirección novel: Estibaliz Urresola, por 20.000 especies de abejas
Mejor actor revelación: Matías Recalt, por La sociedad de la nieve
Mejor actriz revelación: Janet Novás, por O corno
Mejor dirección de producción: Margarita Huguet, por La sociedad de la nieve
Mejores efectos especiales: Pau Costa, Félix Bergés y Laura Pedro, por La sociedad de la nieve
Mejor sonido: Jorge Adrados, Oriol Tarragó y Marc Orts, por La sociedad de la nieve
Mejor maquillaje y peluquería: Ana y Belén López-Puigcerver y Montse Ribé, por La sociedad de la nieve
Mejor diseño de vestuario: Julio Suárez, por La sociedad de la nieve
Goya de Honor: Juan Mariné
Goya Internacional: Sigourney Weaver