‘Juerga hasta el fin’: la amistad puede con el Apocalipsis
25/08/2013 Deja un comentario
No son pocas las ocasiones en las que un grupo de amigos actores deciden rodar una película para su propio disfrute, entreteniendo de igual modo a los espectadores siempre y cuando se haga bien. Esta primera película escrita y dirigida a cuatro manos por Evan Goldberg y Seth Rogen, también protagonista. Lo que ya no estoy seguro de que sea tan común es el hecho de convencer a dichos amigos para que mueran uno por uno y queden plasmados en pantalla como un modelo de egocentrismo, machismo e hipocresía.
Más allá de su humor, bastante inteligente si se compara con lo que hay hoy en día, y de sus efectos, solventes para el tipo de film que es, esta historia apocalíptica ofrece algunos mensajes bastante interesantes que pueden pasar desapercibidos entre tanto gag y tanta diversión. Por ejemplo, que en Hollywood todo es fachada y pocas cosas son realmente honestas salvo, tal vez, la amistad. Y que, por mucha imagen afable y bonachona que ofrezcan, los actores no serán los primeros en ser salvados del Apocalipsis.
Empero, lo que es necesario saber para acudir a la sala es si realmente cumple con lo que promete. La respuesta es un rotundo sí. Sí a todos los niveles y para todos los públicos, tanto para aquellos familiarizados con sus disparatadas aventuras (como Superfumaos, Supersalidos, Caballeros, princesas y otras bestias, …) como para aquellos que descubran a esta nueva hornada de cómicos norteamericanos. La película entretiene gracias a sus constantes referencias cinematográficas, a la burla permanente de los estereotipos que representan los propios protagonistas (encarnándose, en principio, a ellos mismos) y a una banda sonora brillantemente escogida, sobre todo en su tramo final.
Poco importa que su historia sea una mera excusa o que tenga momentos un tanto soeces dedicados a un público muy concreto. Juerga hasta el fin es una comedia sincera, hecha por un grupo de amigos que se divierten dentro y fuera de la pantalla, y que posee humor para todo tipo de públicos. No exige demasiado a los espectadores, es cierto, pero a cambio ofrece una hora y 45 minutos de entretenimiento. Poco más se le puede pedir a la comedia moderna.
Nota: 6,5/10